Una planta de tratamiento de aguas residuales con mayor capacidad que la de San Fernando y la más grande en Colombia con tratamiento secundario de aguas se construirá en Bello y entrará en operación a partir de 2010.
Los diseños de la obra, que tendrá un moderno sistema de recolección y transporte de aguas, estarán listos a mediados de septiembre, anunció el gerente de Empresas Públicas de Medellín, Juan Felipe Gaviria, al tiempo que explicó que se abrirá la licitación para la construcción de la planta, incluyendo las obras civiles, suministros y montajes a mediados de 2008.
El consorcio colombo-alemán Hidroestación Torre del Aburrá, integrado por las firmas HMV Ingenieros Ltda. de Colombia y Pöyry Environment Gmbhde Alemania, ganó la licitación internacional para la ejecución de los diseños, que se iniciaron en agosto de 2006, con una inversión de 19.389 millones de pesos.
La planta, que estará ubicada en un lote de 45 hectáreas, en el sector conocido como Las Pistas, en Niquía, tendrá una capacidad de tratamiento de 123 toneladas diarias de Demanda Bioquímica de Oxígeno (DBO), mientras que la de San Fernando, en Itagüí, tiene una capacidad de tratamiento de 1,8 metros cúbicos por segundo; es decir, 33 toneladas diarias de DBO.
Será la más grande en Colombia porque contará con el tratamiento de tipo secundario para sus aguas residuales, lo que le permitirá remover más del 80 por ciento de la contaminación transportada a través de las redes de alcantarillado.
También contará con un caudal promedio de diseño de 5.0 metros cúbicos por segundo (m3/s). Este valor equivale a la contaminación que producirían 3.880.000 personas.
Ambas plantas, San Fernando y Bello, permitirán que el río Medellín alcance un nivel mínimo de oxígeno de 5 miligramos por litro (mg/l), valor que corresponde a una corriente libre de contaminación.
Esta obra no solo mejorará la calidad de vida de la población sino también el desarrollo urbano en la más importante vertiente del Valle de Aburrá.